La era de Internet tiene sus cosas buenas y otras no tan buenas, todo el mundo sabe sacar una foto y pedir que le hagan aquello que le gusta, pero tener un criterio respetuoso con un edificio existente exige un tiempo y un trabajo que no todo el mundo está dispuesto a asumir, en esta época de los resultados a corto plazo y la inmediatez.
Hoy les hablare de las buenas prácticas en materia de rehabilitación y eficiencia energética usando la herramienta de “una imagen vale mil palabras”, para resumir como se hacen, y bien, las cosas.
Utilizaremos la publicación GUIA DE BUENAS PRACTICAS DE REHABILITACION Y ARQUITECTURA SOSTENIBLE realizado por el Grupo de Desarrollo Rural Alto Narcea Muniellos responsable de la aplicación del Programa de Desarrollo Rural en el Principado de Asturias, que supuso un importante impulso a la actividad socioeconómica de la comarca, y al desarrollo de un proceso de rehabilitación arquitectónica y patrimonial, de mano de la iniciativa pública y privada.
Según indica la guía:
“La arquitectura tradicional y nuestro rico patrimonio etnográfico es una de nuestras señas de identidad, y tenemos la obligación de procurar su conservación, buscando las mejores soluciones y propuestas, sin que esto signifique cerrarse a la innovación y a los avances constructivos, procurando que no la desvirtúen y se conserve su esencia. Nuestra arquitectura y riqueza patrimonial es el resultado de la historia y de los condicionantes físicos y climáticos que han determinado los medios de vida de sus pobladores y han diseñado un paisaje característico de montaña. Sin olvidar que gran parte de la comarca se encuentra ubicada en un espacio natural protegido cuyos ecosistemas fluviales y terrestres son también un rico patrimonio natural donde la Arquitectura Sostenible ha de jugar una importante baza para su respeto, conservación e integración. “
ARQUITECTURA DE LA SIERA NORTE
Al igual que la arquitectura tradicional asturiana, en la sierra aparece, por un lado, la arquitectura tradicional, se encuentra inserta en un proceso de destrucción, donde el abandono de gran parte de sus ejemplares, por falta de uso y mantenimiento, ha provocado su degradación y, en muchos casos, su ruina.
Por otro lado, existe una arquitectura de nueva planta construida en los últimos años, sobre todo en las principales poblaciones, vinculadas con los procesos de crecimiento urbano. En ellas se están utilizando modelos de vivienda muy distintos a la arquitectura popular, en algunos casos, con volúmenes, formas y materiales disonantes.
Por todo ello, en la guía se propone que es el momento de “poner en uso” la arquitectura tradicional existente, incorporando las necesidades y requisitos actuales (servicios y prestaciones que anteriormente no tenían), manteniendo en todo momento la identidad de las construcciones y por extensión las de sus núcleos rurales.
REHABILITACIÓN Y ARQUITECTURA SOSTENIBLE
A la hora de rehabilitar o edificar una nueva planta existen maneras muy diferentes de actuar y abordar el proyecto y que marcarán el resultado final. Existen PLANTEAMIENTOS RECREACIONISTAS, que caen en el “pastiche”. No tan grave en el caso de rehabilitaciones o restauraciones pero si, en el de obra nueva, pudiendo imitar construcciones con una tipología muy característica, pero vacía de los contenidos o actividades que le dan sentido Se pierde el carácter espontáneo y singular de las construcciones del pasado, optando por una arquitectura que rechaza innovaciones técnicas, formales y materiales.
Por otro lado se puede tender a todo lo opuesto, es decir, a una ARQUITECTURA SIN RAÍCES, sin escala, sin respeto por su entorno, con inserción en muchos casos de tipologías impropias de la zona. Se han dado así los “chalets suizos”, los vaciados y desmontes para la implantación horizontal de la vivienda, los cristales de espejo, el azulejo esmaltado, las balaustradas torneadas de hormigón o granito., una estética de “refrito”.
Lo más acertado sería quedarnos en un punto intermedio, una ARQUITECTURA QUE ARMONICE CON SU ENTORNO PERO QUE PUEDA INCORPORAR LA INNOVACIÓN con la introducción de nuevos lenguajes, técnicas y materiales. Se puede utilizar la piedra, la madera, el metal y el vidrio de modo que el resultado final sea integrador pero con una clara vocación actual, moderna y respetuosa. Son muchos ejemplos de excelentes rehabilitaciones donde se hace una nueva interpretación del lenguaje arquitectónico tradicional, bajo las atentas premisas de la innovación, la sostenibilidad y la integración.
ARQUITECTURA SOSTENIBLE
El consumo energético y la limitación de los recursos no renovables afecta al envoltorio de la construcción y a la práctica de la misma. Hablamos así de arquitectura sostenible y/o arquitectura biocimática, que gira en torno a dos principios fundamentales:
- Minimización de los consumos energéticos. Mediante soluciones y materiales técnicos, como el empleo de un buen aislamiento térmico. Control del microclima de la vivienda con un cuidadoso empleo de la ventilación e iluminación natural. Empleo de materiales sostenibles y reciclables obtenidos mediante procesos que consumen poca energía. Empleo racional del agua, mediante dispositivos que reducen los consumos o la utilización del agua de lluvia para otros usos.
- Autonomía energética. Utilizando los recursos renovables de que disponemos, energía solar, geotérmica y eólica, que mediante colectores solares permite la producción de agua caliente sanitaria o producción de energía eléctrica mediante paneles fotovoltaicos, producción de calor mediante calderas de alto rendimiento y bombas de calor
Las directrices que a continuación marca la guía, deben interpretarse en cada momento y para cada situación concreta, deberá respetarse el diseño y las características propias de la arquitectura tradicional evitando principalmente la inclusión de elementos constructivos distorsionadores y fundamentalmente, conservar frente a recrear.
BUENAS PRÁCTICAS
La guía da consejos prácticos, desde la representación fotográfica de las actuaciones bien realizadas, como las que aparecen a continuación:
Espacios o construcciones tradicionales auxiliares de la vivienda: Se recuperarán hórreos, paneras, pajares, cierres, portalones, muros, eras, lavaderos, fuentes, cortinos.
MALAS PRÁCTICAS
Las influencias urbanas así como la variedad y economía de nuevos materiales han transformado la estética de nuestros pueblos. Nuevas formas constructivas y empleo de materiales disonantes con el entorno, tanto en reformas como en nuevas construcciones. Placas de Uralita, cierres de bloque y ladrillo sin revestir (prohibidos por la mayor parte de normativas urbanísticas, que se incumplen sistemáticamente, también en los pueblos de la Sierra Norte), tejas y barandillas de hormigón prefabricado, carpinterías metálicas industrializadas, aplacados y chapeados de piedras son solo algunos de estos materiales.
La mala elección y empleo de estos, así como la introducción de tipologías foráneas genera el “feismo” en nuestro paisaje, provocando una paulatina destrucción de nuestro patrimonio constructivo.
El patrimonio arquitectónico es el legado de nuestro pasado. Nuestro deber está en su mantenimiento y conservación, bien utilizando nuevos lenguajes, bien optando por el mantenimiento de su originalidad., siempre con respeto a nuestra base cultural.
Si una imagen vale más que mil palabras, ¿Qué palabras les inspiran estas imágenes?
BIBLIOGRAFIA
GUIA DE BUENAS PRACTICAS DE REHABILITACION Y ARQUITECTURA SOSTENIBLE realizado por El Grupo de Desarrollo Rural Alto Narcea Muniellos.
BURGOS, JULIÁN, MORENO, JOSÉ ANTONIO y NEVADO CALLE, ÁNGELA, Construcción en el Valle del Jerte (Manual de buenas prácticas), Sociedad para la Promoción y Desarrollo del Valle del Jerte.
CHUECA, VICENTE MIGUEL y RIVAS, FÉLIX A., Espacios vividos, identidades construidas (Arquitectura popular en las Tierras de Moncayo), Asociación para el Desarrollo de las Tierras de Moncayo (Asomo).
Santiago Durán García
Arquitecto Técnico (UPM)
MDI Máster En Dirección Inmobiliaria (UPM)
EEM Gestor Energético Europeo (UPM European Energy Manager)
M. 618.519.717
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